Con SENSUAL (Cartas de Amor y Erotismo
de grandes personajes), los amantes de la literatura erótica tienen la
oportunidad de deleitarse en la lectura de sus páginas. Se trata de un
ejercicio literario nacido en la pluma de los más prestigiosos autores, capaces
de acercarnos al juego placentero que continuamente nos plantea nuestro sentido
más carnal o amoroso. Estas páginas son todo un tratado de libertad. Es bien
sabido que la verdadera plenitud sexual solo puede alcanzarse si hay confianza
para mostrarnos tal como somos, y esto solo es posible a través de una
comunicación íntima, profunda y respetuosa.
En este libro accedemos a la
correspondencia personal de algunas de las mejores plumas de la literatura
universal. En él descubrimos el fino estilo erótico-amoroso utilizado por Henry
Miller en sus cartas a Brenda Venus y Anaïs Nin; igualmente sugerentes y
explicitas eran las respuestas de estas al autor de Trópico de Cáncer. Rozando
la pornografía, aunque literariamente impecable, fue la correspondencia de
James Joyce, autor de Ulysses, con su esposa Nora Bernacle, también la exclusiva
carta, por su rareza, del premio Nobel Juan Ramón Jiménez a Francine Faure.
Llenas de ingenio y disimulo son las cartas de Emilia Pardo Bazán a Benito
Perez Galdós, entre Salvador Dalí y Federico García Lorca, Alejandra Pizornik e
Ivonne Bordelois y entre Virginia Wolf y Vita Nicholson. Casi poéticas son las
cartas de Pablo Neruda, Juan Rulfo, Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares,
Mario Benedetti, Julio Cortázar, Edgard Allan Poe, Franz Kafka, Frida Kahlo, Leon
Tolstoi o Beethoven. Amorosamente desgarradoras y socialmente comprometidas son
las cartas de Miguel Hernández a Josefina, las de Carlos Marx a Jenny y las de Paul
Eluard a Gala. Estamos ante una obra que nos sorprende página a página, y nos
ofrece el epistolario íntimo del Rey Salomón a su esposa Naamah, de Ana Bolena
a Enrique VIII, de Napoleón Bonaparte a Josefina, de Isabel II de Borbón a
Jorge, su amante albanés, o Yoko Ono al añorado John Lennon.
Alguna de estas cartas nos retrotraen
a la infancia y la adolescencia para rememorar el primer amor y los primeros
besos, casi siempre furtivos; las cartas a la novia desde la mili o a la esposa
desde la distancia. La carta era nuestro alivio de soledad en la distancia y el
único contacto con los seres queridos. Con que impaciencia esperábamos la
llegada del correo y con qué pesadumbre pasábamos el día si no habíamos tenido
carta. Hoy, la carta es un objeto de museo cuyo valor ha sido sustituido por la
inmediatez de las redes sociales.
Además, la obra incorpora el valor
añadido de que cada libro de esta edición será un ejemplar único puesto que
estará numerado, dentro de una edición limitada a 500 unidades, y también personalizado
con los datos (nombre y apellidos) de quienes lo hayan reservado previamente
hasta completar la tirada.
Marcel Félix
Quiero comprar el libro
ResponderEliminarEn Barcelona, donde puedo adquirirlo???